Relación calidad-precio: Lavia 2010

Bodegas Lavia pertenece a la D.O. Bullas (Murcia) e inicia su andadura en el año 2003 debido al potencial de las tierras de esta denominación. Utilizan uvas propias y cultivadas a pie de bodega de una forma ecológica y respetando al máximo el medio ambiente. Todo el proceso está controlado de una forma exhaustiva, desde la selección de las mejores uvas en campo, pasando por una recolección en cajas de 15 kg., hasta la entrada de las uvas por gravedad, previa selección de los mejores racimos en mesa. Son vinos complejos, bien estructurados y con personalidad e identidad propias. El vino de hoy está compuesto de Monastrell y Syrah y ha envejecido en roble francés sobre lías durante 11 meses. De color picota cubierto, cierto borde azulado. Limpio. Aroma a fruta roja, floral, violetas, monte bajo y punto especiado. En boca es ligero, fresco, sabroso, fruta roja, frambuesas, equilibrado. Fácil de beber. Y todo ello por unos 10 €. ¿Quién da más?

Recomendación: Guelbenzu Lautus 1999

La familia Guelbenzu inició su trayectoria en el año 1843 y desde entonces recibió los mayores galardones en las exposiciones internacionales de aquella época. Tras unas décadas en las que entró en punto muerto, es en el año 1980 cuando la nueva generación de esta familia se vuelve a poner manos a la obra. En un inicio esta bodega no se adscribe a la DO de Navarra y sale al mercado como vino de mesa, pero a partir del año 2003 y a instancias de Guelbenzu se crea la denominación de Vino de la Tierra de la Ribera del Queiles, una zona limítrofe entre Navarra, Aragón y La Rioja. El vino de hoy es el top de la casa. Elaborado con: 50% tempranillo, 20% merlot, 20% cabernet sauvignon y 10% garnacha. Permanece 18 meses en barrica. De color picota y borde teja. De capa media-alta. Aroma a fruta negra, fruta madura, chocolate, cuero mojado, notas de pimiento verde, roble cremoso. En boca es suave, profundo, sedoso, taninos finos y pulidos. Equilibrado. Amplio postgusto. Muy parecido a los clásicos de Rioja pero con ese punto diferente que le aporta la cabernet y la merlot. Elegante y fino.

Recomendación: Corral de Campanas 2009

Quinta de la Quietud es una bodega de la D.O. de Toro, fundada en el año 1.999 por una pareja francesa y que en el 2.001 fue adquirida por sus actuales propietarios españoles. Como enólogo de la bodega está Jean-Francois Hébrard, de origen bordelés y de larga y exitosa trayectoria en el Ródano. Cuando aterrizó por estas tierras lo que le enamoró fue la pobreza de los suelos junto con la profundidad de los mismos, así se contrasta el calor y la aridez superficial con el frescor y la riqueza del subsuelo. Si a esto le añadimos que se practica un cultivo ecológico, se obtienen vinos de una gran mineralidad y complejidad. El vino que os presento es de color picota. Muy cubierto. Aroma a fruta roja, fruta madura, especias dulces, roble cremoso. Complejo. En boca es potente, frutoso, sabroso, carnoso, equilibrado. Amplio postgusto. Un vino agradable, redondo y placentero que ni cansa ni aburre.